Cada 10 de junio conmemoramos el Día de la Afirmación de los Derechos Argentinos sobre las Islas Malvinas, Islas del Atlántico Sur y Sector Antártico, así declarado por iniciativa del Senado Nacional y sancionado con la Ley 20561 en 1973. Esta fecha se remite a lo ocurrido en el año 1829 cuando el general Martín Rodríguez, entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires y a cargo de las relaciones exteriores del gobierno central, designó a Luís Vernet como el Primer Gobernador Argentino con la orden de la Comandancia Política y Militar de las Islas Malvinas y las adyacencias del Cabo de Hornos en el Mar Atlántico. Ese acto reafirmaba la soberanía y dejaba constancia de pertenencia de esos territorios como extensivos del derecho continental nacional.
Los antecedentes de pertenencia se remontan a un siglo antes cuando potencias de ultramar como España, Francia o Inglaterra, acataban considerar que las tierras contiguas o próximas a las colonias no podían ser objeto de reconquista sin “aprobación”. También el antecedente lejano de la Bula establecía cierto acuerdo en el incipiente Derecho Internacional Continental pero desde 1493 los hechos geopolíticos dejaban sin efecto estas normas y se ajustaban a las diversas alianzas, transitorias por cierto, entre monarcas.
Tanto fuerzas militares francesas en 1763 como inglesas, durante 1765 y hasta 1774, desembarcaron en estas tierras pertenecientes al Reino de España y aunque las declararon como descubrimientos reclamando su soberanía, la vigencia de la norma por proximidad las hizo retroceder, presentar su rendición y volver sobre sus pasos.
Luego de desobedecer lo que habían acordado en 1774, una nueva ocupación de fuerzas inglesas se dio en 1833 y desde ese momento, con el triste antecedente de la Guerra de 1982 y desde la llegada de la democracia, por vías diplomáticas Argentina sigue exigiendo su legítimo reclamo sobre los territorios australes usurpados y su restablecimiento como suelo patrio.